domingo, 6 de junio de 2010

Nadal

Hoy ha ganado Rafael Nadal su quinto Roland Garrós. No es que yo sea una gran aficionada a los deportes, pero sí reconozco mi admiración por algunos deportistas. Ese es el caso de Nadal. En la entrevista que le han hecho, al preguntarle el periodista cuál ha sido el secreto de su triunfo, ha contestado: trabajo.
Muchas veces achacamos a la suerte el resultado de muchas vidas, cuando lo que hay detrás siempre es esfuerzo, sacrificio y voluntad de superación.Creo que estos elementos son suficientes si sumamos una buena dosis de confianza en nosotros mismos, para explicar porque unos llegan tan lejos.
Yo misma, cuando empecé a tener cierto éxito como empresaria tuve que escuchar que había tenido mucha suerte... claro, nadie se acordaba del tremendo envite que supuso para dos personas con veintipocos años montar su negocio, sin apenas un duro, pidiendo prestado a la familia para abrir nuestro Centro de Formación. Por aquel entonces mi marido estaba desempleado (si, ya entonces había paro y los préstamos bancarios al 16% de interés), teníamos un niño de diecinueve meses y otro en camino. Pero no nos faltó nunca confianza en nuestro proyecto, aún a sabiendas de que nos iba a costar esfuerzo y sacrificio. Y resultó.
Vientitrés años después no puedo por menos que recordar aquellos tiempos con mucho cariño. Supongo que habría momentos difíciles, pero el solo hecho de afrontar aquel reto y levantar con mis propias manos un sueño que empecé a imaginar con veinte años me hace sentirme orgullosa, por que no, de mi misma.
Por eso hoy, cuando he escuchado a Rafa Nadal que, después de su derrota el año pasado, todo este tiempo lo ha dedicado a un solo objetivo, superar las dificultades hasta llegar hoy a ser el número uno del mundo, estoy segura que mucha gente se ha visto reflejada en él. Todos aquellos quienes a pesar de los escollos, nos levantamos todos los días con el propósito claro de arribar a buen puerto.
Sed felices.

No hay comentarios:

Publicar un comentario