lunes, 28 de noviembre de 2011

¡No hay nadie que te quiera más que yo!


He pasados incontables veces por debajo de la placa que da nombre a su calle,su propio nombre, Una calle que desemboca en la estación de metro en la que los primeros lunes de cada mes se reúnen ciudadanos en homenaje a las mujeres cuyos ojos amoratados, labios partidos,cuerpos llenos de cardenales y sepulturas, en el peor de los casos, dan testimonio de una lacra cruel, salvaje y sin sentido.
Estoy segura de que muchos desconocen quién es esa persona a quien se le concedió que una vía de nuestra ciudad llevara su nombre. No fue por ser escritora, ni política, ni tampoco una empresaria que hubiera colaborado en el desarrollo de la ciudad. Andrea .R.González tenía sólo siete años cuando la mató su padre en 2003, en venganza de una separación, suicidándose a continuación. Nadie concibe, nadie se imagina cómo un padre puede llevar a cabo este deleznable hecho, pero sucede.
Su madre, una mujer coraje, dirige una asociación para ayudar a mujeres víctimas de la violencia de género. Convirtió su dolor en ayuda a otras que pasan por el mismo calvario.
¡No hay nadie que te quiera más que yo! Gritan muchos mientras golpean sin piedad....
Basta! No existe amor tras el dolor, la humillación y el maltrato. Sólo un delito repugnante basado en el terror y en la locura de los que han confundido amor con posesión.
Todos debemos implicarnos en denunciar, ayudar y educar para conseguir erradicar esta vergüenza social.

Sed felices.

No hay comentarios:

Publicar un comentario