Supongo que no soy la única a quien ante decisiones de cualquier tipo le surgen esos consejeros gratuitos que tras un "si yo te quiero mucho" se hartan de machacarte con las inconveniencias del paso dado. No contentos con ello, acto seguido pasan a explicarte, sin que tú se lo hayas pedido, por qué te aconsejan que desistas o te ponen en antecedentes del desastre que va a suponer si sigues adelante.
Sinceramente, ¿No se dan cuenta de que si necesitara su consejo se lo habría pedido antes de dar el paso? ¿Qué afán de salvapatrias le impulsa a ir siempre avisando, cuan agorero, de los males que acontecerán de insistir en el intento?.
Un cambio de trabajo, una pareja, una opción política o simplemente cambiar de coche o dejarte el pelo largo son buenas excusas para que por lo bajini te vengan a susurrar: "si te lo digo porque soy tu amigo...te estás equivocando..."
Por favor, estoy un poco cansada de aquellos que, sin más argumentos que mirar por el "bien ajeno", son capaces de amargar un dulce...
¿O será más bien que les molesta no haber tenido la decisión o la valentía para actuar de la misma manera?
Lo dicho ... Dios me libre de gente que me "quiere" tanto...
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